¡Vamos a desmitificar esto! Pensemos en la evaluación psicolaboral como un cóctel bien preparado de técnicas que analizan y miden las características psicológicas y laborales de los candidatos para un puesto de trabajo. Imagina una combinación de pruebas psicológicas, entrevistas y otras herramientas que te brindan una visión completa de las habilidades, competencias, personalidad y aptitudes de una persona en relación con el entorno de trabajo.
El objetivo principal de esta evaluación es encontrar al candidato perfecto para el puesto, identificando sus fortalezas y áreas de mejora, asegurando así una mejor compatibilidad entre el perfil del candidato y los requisitos del puesto.
Por lo general se usa en dos momentos:
Para la Evaluación de Futuros Empleados
Es la más común y se realiza antes de la contratación. Estas evaluaciones son como un detector de características de personalidad destacadas y son el complemento ideal de un buen proceso de selección.
Para la Evaluación de Empleados Actuales
También conocidas como Evaluaciones de Potencial, se utilizan para evaluar a empleados actuales cuando se considera su ascenso o desarrollo de carrera. Son perfectas para identificar a los futuros líderes de la empresa!
Las evaluaciones psicolaborales sacan a la luz habilidades y rasgos de personalidad que son difíciles de detectar en una entrevista o revisión de currículum, como la capacidad de resolver problemas, razonamiento abstracto y aprendizaje, entre otras.
Al explorar los intereses y motivaciones de los candidatos, estas evaluaciones pueden predecir su desempeño y perdurabilidad en el puesto, reduciendo el riesgo de una contratación fallida.
Identifican las áreas donde los candidatos necesitan formación, ayudando al empleador a planificar programas de capacitación y desarrollo.
Proporcionan una evaluación objetiva e imparcial del candidato, reduciendo la subjetividad en el proceso de selección.
Ayudan a identificar a los candidatos más adecuados rápidamente, reduciendo el tiempo y los costos asociados al proceso de selección.
No se trata de valorar a la persona en sí misma, sino de comparar algunas de las variables relacionadas a su personalidad laboral con el perfil del puesto y la cultura de la empresa de modo de lograr el “match” adecuado. Las variables habitualmente evaluadas suelen ser:
Cognitivas: Inteligencia, memoria, atención, concentración, organización, planificación, etc.
De Personalidad: Autonomía, liderazgo, tolerancia a la frustración, trabajo en equipo, etc.
Desde hace casi 20 años, nos hemos consolidado como socios estratégicos en la Evaluación de Talentos. Colaboramos estrechamente con las áreas de Capital Humano, asegurándonos asimismo de brindar una experiencia positiva y reconfortante a los candidatos que participan en nuestras entrevistas.
Usamos técnicas tradicionales adaptadas a los tiempos actuales, incluyendo herramientas de gamificación, análisis de casos de negocios y conversaciones reflexivas que evitan las respuestas genéricas o clisé. Trabajamos de manera artesanal cada informe, en un lenguaje claro y accesible.
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